Tras aparcar en Alcaraz y salir del pueblo, la primera subida se hará por asfalto para entrar en calor, tras un pequeño descanso nos meteremos de lleno en plena sierra para pistear, siempre subiendo. Hemos hecho bicitreking, aunque no es necesario, ya que como podréis ver en el waypoint el camino sigue mas adelante. La subida a las Almenaras, o al menos al pico al que hemos subido el cual no tiene nombre, se complicará un poco, aumentando el desnivel y empeorando el firme de la pista, cosa que nos hará apretar los dientes y desear que llegue un descanso en forma de llano o bajada. Y así será, pues ya a falta de 2 km para hacer cima empezaremos a bajar y subir, las piernas descansarán y estarán listas para el esfuerzo final, pues la última subida entre hierva y tras el cansancio de 40 km picando hacia arriba se hará dura. Una vez en lo alto y observando la magnificencia de las Almenaras se almorzará, y se hará bien, pues todavía queda ruta y una parte importante. Se bajará por senda, la cual es mas técnica al principio pero quitando un par de puntos concretos se puede hacer montado, disfrutaremos y volveremos a la pista que nos llevará en rápida bajada a la carretera del Barrancazo, el cual subiremos unos 3 km y coronaremos el puerto. En este punto volveremos a girar, por un camino que al principio está roto, luego está bien y de nuevo vuelve a estropearse y a aumentar en desnivel con picos del mas del 20%. Se llegará tras unos kilómetros a lo alto de esta loma y se bajará por una rambla que es cuanto menos curiosa. Dejada la rambla atrás y con tendencia a bajar haremos la última senda de la jornada, de nuevo limpia y rápida, exceptuando su parte final donde encontraremos piedra y tenemos que tener cuidado. Terminado esto la ruta está casi finiquitada, pues nos quedará subir por las calles de Alcaraz para llegar al coche y terminar este pedazo de ruta.
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