La ruta comienza como todas las que suben a Chinchilla, por el cordel de dicho pueblo avanzaremos hasta las clásicas Culebras para subirlas, un buen ritmo para ambos ciclistas que los hacían plantarse en la senda de la oveja rápidamente. Bajada rápida y fácil, solo nos preocupará la presión del neumático y la piedra que hay en esa senda, pues como en el caso de hoy la rueda de Silent ha reventado tras un llantazo. Tras la reparación giraremos hacia la derecha, donde se hará una nueva senda muy sencilla, solo habrá que tener cuidado en un punto en el que se cruza y puede quedarse la bici clavada. Llegaremos a Pozo la peña, donde podremos repostar agua, puesto que el verano en Albacete es caluroso. Seguiremos por la carretera que nos lleva a Chinchilla, pero no entraremos al pueblo, pues giraremos a la derecha para buscar la vía de servicio de Alicante, y a los metros volver a girar a la derecha para volver a subir otro tramo para enganchar con la carretera de la estación de Chinchilla. Una vez ahí nos meteremos en sierra procomunal, dirección mirador y giraremos antes de llegar para subir un camino en mal estado el cual desemboca en bicitreking durante unos metros. LA recompensa llegará después en forma de senda, una senda de bajada con algo de piedra donde poner nuestra técnica a prueba, pues el mal uso de los frenos hará que la montura se nos descontrole. Terminaremos esta senda en la rambla seca, y justo después podremos parar a almorzar a la sombra. Volveremos a chinchilla subiendo el matamulas, y tras ello relajaremos por la senda del agua para poner dirección a Albacete y volver peleando contra el aire, aunque como siempre que se vuelve lo haremos a todo trapo.
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